editorial  

Benjamín Kuchen
Rector - Universidad Nacional de San Juan

Balance de una institución viva

Durante este año la Universidad Nacional de San Juan estuvo expuesta muchas veces en los medios de comunicación. En la mayoría de los casos con informaciones dirigidas a hacer conocer a la sociedad sanjuanina la actividad académica universitaria, pero otras veces haciendo referencia a situaciones no deseadas.

Los finales de año motivan un balance necesario para reflexionar y modificar lo que daña o lo que es incorrecto. El año 2007 arrancó con cierto alivio ya que durante las vacaciones de enero se pudo solucionar, en el marco de una paritaria nacional, un conflicto gremial con el sector del Personal de Apoyo Universitario (PAU) que había tenido en vilo a la UNSJ sobre el final de 2006. Este respiro no duró mucho y surgieron conflictos gremiales con el sector docente por cuestiones salariales que tuvieron fuerte impacto en los colegios preuniversitarios. La pérdida de clases llevó a conflictos entre padres, profesores y autoridades que involucraron a la justicia federal, incluso. Al mismo tiempo, comenzaron a ponerse en evidencia situaciones cada vez más tensas en relación al proceso de reencasillamiento del PAU. Con gran esfuerzo de las distintas autoridades y cuerpos colegiados de la universidad y de la parte gremial, se alcanzó una solución satisfactoria, la que si bien aún no está totalmente implementada, ha permitido seguir adelante con una marcha normal de la institución. Sin embargo, estas situaciones difíciles no impidieron que nuestra universidad continúe a pleno con todas las actividades.

En los aspectos académicos merece destacarse tanto el avance en las políticas de formación de posgrado, con la aprobación de programas de doctorado y maestría, como los logros obtenidos con proyectos que refuerzan las políticas de ingreso no restrictivo, tales como los sistemas de tutorías, articulación con el nivel medio y articulación en el propio nivel de educación superior.

En investigación y creación merece destacarse el incremento logrado en el presupuesto para las actividades de investigación que, sumado al aprovechamiento de los aportes externos de financiamiento, refuerzan una tarea sustantiva de la universidad. Continúan los sistemas de becas de investigación para graduados y estudiantes avanzados y las becas internas y externas para la realización de posgrados.

En extensión universitaria, el compromiso social de la universidad con el medio se refleja en los numerosos convenios interinstitucionales firmados a nivel municipal, provincial, y con entidades del extranjero.

Las políticas de desarrollo local e inclusión social avanzaron a través de proyectos cofinanciados con la provincia y proyectos de extensión sostenidos con fondos de la UNSJ. Las acciones con los centros culturales municipales y con la población carcelaria profundizaron el desafío de universalizar el derecho a la educación y a la cultura.

La universidad tuvo una importante actuación en el área de relaciones internacionales e institucionales a través de su participación en el Programa de Promoción de las Universidades Nacionales y proyectos en red. Se desarrolló con mayor intensidad el programa de movilidad e intercambio estudiantil y docente y se implementaron talleres sobre elaboración de proyectos y difusión de programas de becas al exterior.

Bienestar Universitario, a través de una nueva ordenanza, plantea reestructurar la política de becas para volverlas más eficientes. Con la nueva ordenanza presentada se amplía el número de alumnos beneficiados, se agilizan los procedimientos para su otorgamiento y se aumentan los montos que percibirán los estudiantes. Además, la firma del convenio recientemente celebrado con el Ministerio de Salud de la Nación permitirá que estudiantes sin cobertura social reciban los medicamentos básicos considerados en el marco del Programa REMEDIAR. La asignación de los recursos antes señalados adoptará una mayor racionalidad con la aplicación de la 1º encuesta orientada a precisar la situación social y de salud de toda la población estudiantil de la UNSJ.

En cuanto al plan de obras, este año se concretó la construcción de la primera etapa de aulas y laboratorios para la carrera de Agronomía en terrenos del INTA; la segunda etapa de las terrazas de la Facultad de Ciencias, Exactas, Físicas y Naturales; las obras del Instituto Sismológico y se finalizaron las obras del edificio central de la UNSJ, entre muchas otras.

Los aspectos positivos y conflictivos muestran a una institución viva que con los aportes de todas las partes que la componen, con los consensos y disensos, puede encontrar el equilibrio para continuar desarrollándose.

Para finalizar, con motivo de ser éste el último número del año, quiero saludar y agradecer a la comunidad sanjuanina y universitaria por el trabajo de todo un año. Para todos, mis deseos de un buen 2008.