-Se aprobó la Carrera Académica, ¿qué implica esto para la universidad, siendo un proyecto que viene en discusión desde hace años?
-La Carrera académica es un instrumento que nuestra universidad requiere. Desde hace años se ha manifestado la importancia de tener una carrera académica. El Estatuto Universitario establece que la única manera de que el docente pierda su condición de efectivo es a través de un juicio académico. Esta carrera genera que en caso de evaluaciones con resultados negativos reiterados, hay causal de juicio académico, pero son situaciones especiales. No es el caso de juicio académico como normalmente se lo entiende, en el sentido de razones éticas o morales, sino por causal de resultados de evaluación no satisfactorios.
-Pero aún resta elaborar todo el articulado de la normativa…
-El articulado está elaborado pero se tiene que discutir, porque hay que compatibilizarlo con otros proyectos y otras opiniones.
-¿Cuándo comenzará la discusión del articulado, punto por punto?
-En estos casos el propio Consejo Superior se constituye en comisión y tiene que ir estudiando y aprobando el articulado. Estimo que habrá un par de meses de trabajo bastante intenso, de tal manera que tengamos pronto la carrera académica en funcionamiento. Sería bueno que antes de fin de año ya entre en vigencia para que el año que viene ya contemos con este instrumento.
-Un punto polémico tiene que ver con la posible participación de alumnos en las comisiones evaluadoras…
-El proyecto original planteaba una evaluación por pares evaluadores, con la presencia de estudiantes, docentes y egresados como veedores. Pero los estudiantes hoy plantean no sólo ser veedores sino también tener voz y voto. Yo no me opongo a este pedido pero lo tiene que decidir el Consejo Superior. Hay universidades en las que los alumnos tienen voz y voto, como las de Mar del Plata, de Córdoba y Nordeste.
-Otra discusión en el proyecto original presentado tenía que ver con la situación de los ya concursados, después hubo una modificación en el proyecto tratado en el Consejo Superior, ¿cuál es la modificación?
-El proyecto hace referencia exclusivamente a la evaluación de los docentes efectivos, quienes ya hayan rendido un concurso. Esto generó mucha discusión por parte de los efectivos actuales, ya que plantearon que eran evaluados bajo un determinado esquema y que este cambio de reglas de juego a mitad de camino sería incorrecto, incluso hasta legalmente cuestionable. Por eso es que se ha propuesto una cláusula transitoria, la cual básicamente dice que esta carrera académica es para lo que viene, no para lo que ya fue. Es decir, para los nuevos efectivos. Los efectivos actuales seguirían siendo evaluados de acuerdo a la ordenanza vigente, que tiene un procedimiento de evaluación y que no existe la intención de cambiarlo.
-¿Habría dos mecanismos de evaluación entonces?
-Sí, uno para profesores efectivos actuales y el otro para todos aquellos que ingresen como efectivos en la carrera académica. Va a haber un ingreso muy importante de efectivos en los próximos años. Calculamos que habrá unos 800 cargos a concursar. Además quienes concursan o quieren una promoción, accederían automáticamente a este nuevo esquema de evaluación. Incluso los efectivos actuales también podrían hacerlo porque sería opcional para ellos.
-¿Cuáles son las opciones en cuanto a las evaluaciones y su periodicidad que contempla la Carrera Académica?
-El proyecto preveía dos mecanismos de evaluación: por informe y por reválida. Estos dos mecanismos coexisten en las universidades del país. La reválida es el procedimiento en que el docente confronta a través de un coloquio en forma directa con la comisión evaluadora y se realizará cada 6 años. Los informes son cada 3 años. En el debate en el Consejo Superior fue propuesta una posible combinación de ambos. Es decir, que se evalúe por informe y, si hay un resultado negativo, se vaya a una reválida, en que habría una mayor profundidad de análisis.
-Tanto la discusión sobre Carrera Académica como sobre la modificación del Estatuto Universitario se da en un momento próximo a la finalización de su mandato y a la elección de nuevas autoridades, ¿teme que esto entorpezca el debate?
-No creo que eso suceda. En primer lugar porque no estamos tan cerca de las elecciones. Por otro lado, este es un instrumento para la universidad que trasciende cualquier gestión y creo que es bueno para todos. Insisto en señalar que la Carrera Académica, dependiendo de lo que resuelva el Consejo Superior, podría no incidir sobre los docentes efectivos, es un cambio a futuro. Esto es para la universidad que viene; además yo no soy candidato en las próximas elecciones. No se puede establecer una relación de cuestiones electorales con un instrumento de semejante magnitud. Esto hace 10 años que se está tratando en la universidad. Yo lo que hago es responder a una necesidad institucional que existe. |