El 30 de noviembre de 2003, el Instituto de Investigaciones Arqueológicas y Museo "Profesor Mariano Gambier", cerraba sus puertas en el Hotel Termas La Laja, en Albardón, para mudarse a un local más amplio en Ruta 40 (lateral este, entre Progreso y Calle 5), departamento Rawson.
Detrás de la actual fachada que reproduce motivos aborígenes, la directora del Instituto junto a su personal, trabajan afanosamente aunque sin fecha definida para inaugurar pronto lo que será el nuevo IIAM "Profesor Mariano Gambier".
El edificio alquilado albergará ocho salas de exposición museográfica organizadas por muestras (Fortuna, Morrillos, Ansilta, Agricultura Temprana y Media, Etapa Tardía, Angualasto, Inca y el espacio de exhibición transitorio) y una pequeña sala de conferencias para actividad docente y exhibición de material audiovisual. |
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"La muestra base va a ser la misma", dice Catalina T. Michieli, directora del instituto, "se podrán ver las distintas etapas del poblamiento con un sentido cronológico: desde que aparece el hombre en nuestra región hasta la conquista española. Pero innovamos con una sala de carácter transitorio (que en otros locales no se pudo hacer por falta de espacio) y que cambiará dos o tres veces al año."
Esta sala exhibirá aquello que no se incluye en la muestra central, como el trabajo fotográfico de investigación más reciente que se hizo sobre unos sitios incaicos en la Quebrada de Conconta, Iglesia (que se vio en el programa Bien Nuestro, emitido por Canal 8, el 23 de mayo de este año). Además, con la renovación periódica aumentaría la afluencia de público al Museo, que se encontrará con algo nuevo en cada visita.
En el espacio restante del edificio, están organizadas las áreas que conforman el instituto arqueológico: laboratorio, archivo, biblioteca y un ambiente de trabajo abierto y flexible a las condiciones de investigación requeridas. También se incluyen otros servicios, como la parte administrativa, un depósito, carpintería.
"No tenemos fecha de apertura aún", informa Michieli, "porque las obras de infraestructura se manejan a través de licitaciones, que llevan un tiempo administrativo. Pero por fin vamos a poder adaptar el local a la muestra, y no al revés como ocurría con las sedes anteriores".
El nuevo local del IIAM representa una oportunidad de mejorar los servicios que ofrecían y un cambio positivo para quienes trabajan allí. La directora expresó que las anteriores condiciones eran precarias y las limitaciones físicas impedían un ambiente de trabajo cómodo. Además, la distancia obstaculizaba la afluencia de turistas al lugar, ya que los circuitos del turismo por el día no incluyen aquella zona.
Aun así, de enero a noviembre de 2003, asistieron más de 16.000 personas, de las cuales el 61% eran escolares. La expectativa es superar esta cifra. Investigación y divulgación
EL IIAM "Prof. Mariano Gambier" es una unidad de investigación y divulgación dependiente de la Facultad de Filosofía, Humanidades y Artes, que contiene la parte de exhibición museográfica y data de 1965. Fue creado con el objeto de impulsar la investigación arqueólógica. Trabaja con un programa institucional llamado "Conocimiento y difusión de la prehistoria de San Juan" que cubre dos grandes áreas: creación de conocimientos originales a través de la investigación, y su difusión académica y museográfica.
Michieli explica al respecto: "Tenemos una serie de publicaciones científicas del trabajo de campo y de laboratorio; hacemos presentaciones en congresos y cursos de extensión (en junio estuvimos dictando un curso en el departamento Iglesia para docentes de Polimodal y EGB 3). Hace un año y medio atrás dimos un curso de reconocimiento de piezas arqueológicas, relacionado con el tráfico ilícito y dirigido a las fuerzas de seguridad."
La transferencia del producto de las investigaciones sigue una línea de divulgación basada en la accesibilidad. "Nos preocupamos mucho porque llegue a la comunidad; tenemos publicaciones dirigidas a los maestros, al público común y otras que son más científicas", aclara.
La tarea del Museo en este aspecto es importantísima, ya que representa una línea directa de la investigación a la comunidad: "Generalmente los trabajos científicos casi de cualquier índole tienen un desarrollo muy largo: diez años de trabajo de investigación, otros diez para publicación y lectura por parte de colegas, y otros tantos para que sean tomados por los manuales y baje a la comunidad. Son treinta años. Con el Museo se difunde una investigación mientras se está desarrollando o apenas se termina. Y esto influye en la transmisión, lo vemos en el público en edad escolar: chicos que corrigen a los grandes porque lo han visto en el Museo y lo han estudiado de otra manera. En este sentido, el museo es la ventana de la investigación".
Las publicaciones, una serie de revistas de temas arqueológicos, libros científicos y otros materiales para docentes de EGB3 y Polimodal, están disponibles para la venta en la misma sede del Museo y en algunas librerías, o pueden consultarse en las bibliotecas de la universidad. También algo de este material es posible encontrarlo en el sitio que el IIAM "Prof. Mariano Gambier" tiene en la página de la Facultad de Filosofía, Humanidades y Artes.
Conservación arqueológica
San Juan tiene una posición de privilegio. Es una de las pocas zonas del mundo que tiene una extraordinaria conservación de los restos arqueológicos debido a su clima desértico tan particular. "Es uno de los pocos lugares no sólo del país sino de Sudamérica, que tiene una idea de las etapas del poblamiento prehispánico", afirma la directora, "algunos momentos están más completos que otros, pero hay un esquema general y se está trabajando para completar las casillas del esquema. Además, el profesor Mariano Gambier con su dedicación y profesionalismo, ha hecho mucho por la investigación y difusión en este campo".
"Este patrimonio arqueológico le sirve a la comunidad para conocer el pasado, identificarse y sacar ejemplos de cómo el hombre logró no sólo vivir sino sobreponerse y dominar al de sierto", expresa la directora, para quien la arqueología es un método para estudiar aquello que no ha quedado escrito. "Es una historia de la vida cotidiana de los pueblos".
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