edición 47
AÑO VII - Nº 47 | Mayo 2010
Columna de Artes Visuales
El Arte
y la construcción de la Memoria
Por Licenciada Graciela Ochoa
Docente del Departamento de Artes Visuales - FFHA - UNSJ
Al cumplirse 34 años del trágico golpe de Estado de 1976, es importante reflexionar sobre la repercusión en las artes de la posibilidad de trabajar en la recuperación de lugares de memoria y considerar la significación de este ámbito como un marco cultural para el artista.
Cabe mencionar que este marco surgió en el campo de las artes visuales a partir de una concepción denominada “arte para sitios específicos”, que con el fin de reaccionar contra la mercantilización de las obras de arte, dio lugar a que los artistas pudieran manifestarse en zonas ajenas a la institución artística. De tal modo que saltaron del museo al espacio público, constituyendo la calle en un espacio de enunciación para el desarrollo del arte público y para la acción política concreta. En este escenario se ha modificado paralelamente la condición del museo, que fue perdiendo sus funciones tradicionales para convertirse en una compleja empresa de renovaciones y recuperaciones.
Cuando en Argentina, a partir del año 2000, organizaciones de Derechos Humanos y otras instituciones civiles y religiosas comenzaron a plantear la recuperación de los centros clandestinos para la “reconstrucción y conservación” de la memoria, se abrió un profundo debate acerca de la vinculación del Museo de la Memoria con la temática del autoritarismo y, en particular, con la última dictadura militar. Desde entonces los artistas visuales más destacados de la Argentina así como los emergentes, han sido convocados a participar de un espacio de permanente búsqueda y construcción de una memoria común.
En este sentido entonces, no podemos olvidar el rol y la acción que cumplieron la sociedad en conjunto con los trabajadores y trabajadoras del arte y la cultura en la reconstrucción democrática. De tal modo que pueden ser considerados un puntal de resistencia y justicia, con capacidad para generar la constitución de diversos espacios discursivos para la memoria. Esto significa sacar el arte de la mera concepción del trabajo individual o del arte por el arte, para asumir nuevos retos y compromisos en los procesos de transformación social, demostrando que la unión entre la imaginación y el deseo de honrar la vida puede contribuir a superar la imposición y el autoritarismo.
Copyright © 2004 - 2010 Revista La Universidad | Universidad Nacional de San Juan - Argentina | Todos los derechos reservados | revista@unsj.edu.ar