Margarita Camus, sobre la realidad de las becas universitarias
 “Igualdad
de oportunidades
no es medir como iguales
realidades diferentes”
La secretaria de Bienestar
Universitario de la UNSJ participó de un encuentro
de titulares de esa área en Catamarca. Allí
planteó la necesidad de ampliar las becas hacia alumnos
de condiciones económicas vulnerables y no sólo
incrementar el monto de quienes ya gozan del beneficio.
Por
fabián rojas
“Se habló de todo
lo referido al Programa Nacional de Becas, de acuerdo a
las realidades que se plantean en las universidades”,
dijo la abogada Margarita Camus, secretaria de Bienestar
Universitario de la UNSJ, respecto de la Segunda Reunión
de Secretarios de Bienestar y Asuntos Estudiantiles desarrollada
en mayo pasado en Catamarca. En ese cónclave,
la representante de esta casa de estudios fue una de las
impulsoras a considerar un giro en las políticas
de entrega de becas. Básicamente su planteo avaló
un aumento presupuestario para lograr la igualdad de oportunidades
en cuanto a esos beneficios. “Un incremento de becas
solamente para los actuales becarios no alcanza, hay que
aumentar la cantidad de becarios”, repitió
ante esta revista la secretaria.
-Ante su planteo de necesidad
de más beneficiarios, ¿cuál fue la
reacción que suscitó en el encuentro?
-Estaban divididas las opiniones de las universidades. Algunas
pretendían reforzar sólo el monto de los actuales
becarios y otros planteamos nuestro acuerdo con que se incremente,
pero entendemos que el tema pasa por aumentar el presupuesto
y destinar becas prioritariamente a sectores sociales que
no tienen acceso a la universidad.
-¿Existen parámetros
sociales para la distribución de becas?
-Hay que pelear por los criterios de distribución.
No es lo mismo provenir de una escuela privada, de una familia
de profesionales, que pertenecer a la clase trabajadora,
ser de zona rural. Esta es una universidad pública,
entonces es la única posibilidad que el pueblo tiene
de acceder a estudios universitarios. Decir igualdad de
oportunidades no es medir como iguales a quienes tienen
realidades diferentes.
-El ejemplo puede darse en
estudiantes de departamentos alejados…
-Un hijo de un peón de viña de Angaco, con
muy buenas notas, ¿cómo viene a estudiar a
la universidad?, ¿cómo paga el colectivo,
las fotocopias, si no accede a becas nuestras? Si no se
tiene una política específica a este alumno
nunca se lo va a poder mantener en la universidad. De todas
maneras, somos una de las universidades que tiene un programa
fuerte de becas, eso quiero rescatarlo, porque cuando veo
las otras universidades me doy cuenta.
-Pero las becas también
deben seguir priorizando el rendimiento académico…
-Ese es el sentido de las becas, pero hay que plantear las
desigualdades que tenemos hacia el interior de la provincia.
En esos casos hay que discriminar positivamente para empezar
a arrimarnos a la igualdad de oportunidades.
-¿Esa discusión
ya está instalada?
-Creo que esta es una discusión que nos debemos entre
todas las universidades y también hacia el interior
de la nuestra. O mantener lo que tenemos, sólo con
el discurso de excelencia académica, o una universidad
que contenga a otros sectores de la sociedad.
-En este año ¿qué
se puede hacer?
-Ya terminaron las inscripciones para becas. Para el año
que viene es importante ir generando este debate y también
profundizar las relaciones con los municipios alejados porque
hay cosas que se pueden hacer en colaboración con
ellos.
-¿Cuáles, por
ejemplo?
-El alumno que viene por ejemplo de Valle Fértil
necesita tener garantizado vivienda, comida y transporte.
Con el municipio podríamos establecer que absorba
el alquiler del inmueble y nosotros el transporte y la comida.
Creo que hay que comprometer a las autoridades departamentales.
Esos chicos pueden egresar de la universidad y transformarse
en actores de cambio en sus departamentos y contribuir al
crecimiento.
arriba
>>>
Campaña
informativa de salud para agosto
“Este año queremos sumar los alumnos universitarios
a los preuniversitarios no solamente en salud reproductiva
y derechos sexuales, sino también en enfermedades
infecto contagiosas, como el Sida”, señaló
Margarita Camus. El proyecto será presentado en el
corto plazo al rector Benjamín Kuchen. Habrá
colaboración de los centros de estudiantes, ya que
se apuntará a la formación de alumnos voluntarios
para que se visualice el centro como un lugar donde consultar.
“Estamos en conversaciones para concretar un convenio
con la Fundación Care Peer, que trabaja con el tema
del HIV en San Juan, con proyectos subsidiados por Presidencia
de la Nación. En agosto se largaría como campaña”,
agregó la secretaria del área de Bienestar.
Proyectos
de Voluntariado
“Hay un proyecto de derechos humanos de la Facultad
de Ciencias Sociales que se realiza en una parroquia en
Santa Lucía, en una zona de población vulnerable.
El tema es el aprendizaje de los chicos sobre derechos humanos
a través del juego. Se está trabajando con
cerca de sesenta niños y se está gestionando
para que una vez terminado el proyecto la comunidad lo pueda
continuar”, indicó Margarita Camus. Todos los
alumnos universitarios pueden participar de los proyectos
de voluntariado. Las temáticas son amplias y deben
tener la colaboración de un docente-tutor. Los proyectos
son financiados por la Secretaría de Políticas
Universitarias de la Nación.
Primero
los estudiantes
“Hay un proyecto para armar equipos específicos
que se encarguen de los estudiantes. Si lo logramos, la
universidad tendrá una política en salud,
no medios parches como tenemos ahora. Nuestra política
es brindar muchísima información, queremos
unir salud con deporte. Desde Salud Universitaria trabajamos
mucho con el comedor, controlando la calidad de la comida
que los becados reciben. Pondríamos el énfasis
en los estudiantes. Ellos son la población más
vulnerable de la universidad. La mayoría de los estudiantes
no tiene cobertura social”, remarcó Margarita
Camus.
Accesibilidad
para todos
“Vamos a trabajar este año en lo referente
a discapacidad y a accesibilidad física a los estudios.
La accesibilidad física tiene que ver con las rampas
y las condiciones edilicias. La de estudios... es la posibilidad
que tiene una persona con determinados medios puestos a
su disposición para poder estudiar. No permitimos
que alumnos ciegos estudien comunicación, porque
hay materias como Fotografía y Filmación o
Televisión. En Mendoza sí estudian, porque
se plantea que ellos pueden hacer locución, periodismo
oral y hay programas de computación con los que ellos
pueden trabajar. No queremos quedarnos en decir que nosotros
cumplimos porque hacemos rampas. Hay una cuestión
de cambio de mentalidad, de decir que esos alumnos tienen
capacidades diferentes a las nuestras, pero no son incapaces.
Nos hemos conectado con equipos de investigación
de la Facultad de Arquitectura de la UNSJ que están
trabajando con el tema accesibilidad, y con las redes de
discapacidades y derechos humanos”, manifestó
la secretaria de Bienestar Universitario.
arriba
>>>
|
