Estudiantes que “cristalizan” algo más que sus sueños
Las y los miembros del Club de Cristalografía de la Escuela Industrial «Domingo Faustino Sarmiento» participaron en el concurso del 2022 y obtuvieron excelentes resultados.
Por Marcela Ormeño
El pasado mes de septiembre se realizó el Concurso de Crecimiento de Cristales para Colegios Secundarios 2022 en el que se presentó una vez más la Escuela Industrial Domingo Faustino Sarmiento de la UNSJ con cinco proyectos, resultando tres de ellos distinguidos con un primer premio en su categoría y dos con menciones de honor.
La escuela viene participando en las diferentes ediciones del certamen organizado por la Asociación Argentina de Cristalografía, con excelentes resultados. Este concurso se realiza desde 2014, año que fue declarado por la UNESCO como año internacional de la cristalografía. En 2022 se presentaron 250 proyectos en total y la Escuela Industrial, fue la única escuela que participó con más de una propuesta.
En esta ocasión el proyecto “Saqueo Cristalizado” del alumno Franco Mattiazzi de 6to año especialización Química obtuvo el primer premio en la categoría 1 “Crecimiento de Monocristales” con mención a la rigurosidad científica.
Por otro lado, el trabajo “Concurso de los Defectos” de autoría de Marcos Agüero, Juan Cruz Díaz y Eugenio Feldman alumnos de 6to año especializaciones Química e Industrias, fue distinguido con una mención especial.
De igual manera la propuesta “Cristalicen a Siku” perteneciente a Martina Robledo y Sofía Torres de Quinto año de Química, también fue calificado con una mención especial.
La dinámica de la participación en el concurso inicia desde el momento en las docentes informan a sus estudiantes qué categorías hay en el concurso. A partir de ese momento las y los jóvenes proponen el tema, la sustancia que les gustaría cristalizar, la temática que seguirán y los objetivos que quieren cumplir. Siguiendo las etapas del método científico, van elaborando su proyecto que luego plasman en un informe o un video que es lo que se envía a la Asociación y a partir de ahí se hace la selección.
A partir del anuncio de los trabajos ganadores, las docentes Viviana Mercado y Viviana Atencio viajaron junto a los y las estudiantes, a la Jornada de Finalistas y Ceremonia de Premiación que se realizó a fines de octubre de 2022 en el Pabellón Argentina de la Universidad Nacional de Córdoba. En el evento las y los estudiantes debieron exponer y defender sus proyectos en una jornada muy intensa que duró desde las 12 hasta las 20 horas, ante un jurado muy exigente que este año estuvo integrado por el presidente de la Asociación Argentina de Cristalografía; el presidente de la Asociación Argentina de Mineralogía; el ex presidente de la Asociación Italiana de Mineralogía y el presidente de la Comisión Nacional de Energía Atómica.
Cabe destacar que estos trabajos forman parte de una actividad extracurricular, de carácter voluntaria y a contra turno que las y los estudiantes realizan en el Club de Cristalografía los jueves de 14 a 18 horas. Este club se inició en el 2014 cuando asistieron al colegio integrantes de la Asociación de Cristalografía a capacitar a docentes. En aquella oportunidad también anunciaron que existía una propuesta de concurso a nivel internacional que la Asociación Argentina tomó como inspiración para realizar la versión nacional adoptando la idea de competencia para aplicarlo a las escuelas secundarias.
De igual manera funcionan los otros 11 clubes que integran el Gabinete de Investigación de la Escuela. Este gabinete se formó en el 2016 y nuclea a los diferentes clubes: Ajedrez; Ambiental; Astronomía; Ciencias; Programación; Ciencias Sociales; Cristalografía; Constructor; Nanotecnología; Robótica; de Tecnologías Aplicadas y Campamentos Científicos.
Cuando les preguntamos a las docentes como es la dinámica de sus estudiantes en estos clubes ellas manifestaron que: “Es una actividad en la que ellas y ellos, aunque tienen una carga horaria muy alta, aun así, eligen permanecer en el establecimiento 4 o 5 horas más para trabajar en el club en sus propios proyectos. Las docentes vamos guiándolos, apoyándolos, proporcionándoles el material teórico, las técnicas de laboratorio, es un trabajo arduo”
“En cristalografía – continúa diciendo la docente- se les enseña los diferentes métodos en 5to. Año, y forma parte de una materia que es Química inorgánica. Y cuando la Asociación Argentina propone el concurso nos pareció importante participar porque es una manera de que las y los estudiantes pongan en práctica lo que aprenden en clase. Uno de los logros principales de haber participado en el concurso, además de poner en práctica los conocimientos que vienen adquiriendo, es aprender estas habilidades y desarrollarlas, que son totalmente distintas a lo que es una clase tradicional”
“Además -acotaban las docentes- se les ve en la cara, en las ganas que le ponen, es un trabajo que disfrutan, y en ese disfrute están aprendiendo constantemente con una metodología totalmente distinta a la que tenemos dentro de un aula. Estamos sumamente orgullosas y satisfechas, porque vemos que a través de los años va teniendo una continuidad, y siempre con buenos resultados. Los resultados reflejan el trabajo tan bien hecho por parte de las y los estudiantes. Buscan participar, lo piden desde el inicio del año y a veces nos hemos visto en la obligación por una cuestión de capacidad de los laboratorios de tener que poner un límite. Tenemos 20 alumna/os y hemos llegado a presentar hasta nueve proyectos en el concurso de cristalografía”.
A su vez las y los estudiantes manifestaban sobre su experiencia: “Fue un logro importante, y más allá del logro, fue aprender de la experiencia, disfrutar y enriquecerse de los otros trabajos en la exposición. Había diferentes trabajos que se podían consultar y comparar como trabajó cada uno y aprender de las diferencias”
“Trabajar en el laboratorio – seguían diciendo- es más entretenido que el aula y más distendido, aunque manteniendo la rigurosidad científica. No estamos viendo cosas teóricas, pero si estamos utilizando el material de laboratorio por lo que estamos aprendiendo a cómo utilizarlo, las reglas del laboratorio”.
Cuando les preguntamos sobre el concurso en sí, ellos expresaron: “Uno no es consciente de lo que sabe hasta que está exponiendo. Cuando exponemos y nos preguntan cosas y sabemos responderlas ahí entendemos que aprendimos todo ese año de lo que estábamos haciendo”. Y con respecto a la ‘buena noticia’ dijeron: “Ese momento cuando nos enteramos que ganamos fue muy bonito. Estuvimos en el medio del pasillo de la escuela festejando los logros”
