Para muchos varones, las enfermedades de transmisión sexual sólo es cuestión de mujeres

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La tesis de Doctorado en Ciencias Sociales de Victoria Galoviche revela el fuerte imaginario machista impregnado en cuestiones de salud sexual (no) reproductiva en San Juan. Expresiones que sorprenden a la misma investigadora de la UNSJ. De todas maneras, parecen asomar tenues evoluciones.

Por Fabián Rojas

En lo referente a enfermedades de transmisión sexual, muchos varones no pueden observarse como personas con capacidad de enfermar o contagiar; por el contrario, colocan el foco en las mujeres, parejas, esposas, a quienes sí las ven como portadoras del peligro de enfermarse y enfermar a otras personas. De hecho, sigue habitando en ellos visiones que hasta los lleva a aconsejar a otros varones: “Que se cuiden en esto de la sexualidad, que se pongan preservativo, que vean que la mujer con la que van a estar esté sana, que se averigüen cómo anda, cómo está”.
Esta realidad fue abordada en la tesis de la flamante doctora en Ciencias Sociales Victoria Galoviche. Como explica esta investigadora de la Facultad de Ciencias Sociales de la UNSJ, en el trabajo recolectó voces de varones y mujeres de Chimbas, Angaco y Albardón, zonas cercanas a centros sanitarios donde trabajan agentes de salud consultados por esa temática. El título de su tesis es “Masculinidades y Salud Sexual y (no) Reproductiva: prácticas y percepciones sobre la salud/enfermedad/cuidado de varones en la provincia de San Juan”.
Victoria Galoviche afirma que son relativamente recientes y escasos aún los antecedentes y estudios sobre las percepciones, actitudes y comportamientos de los varones en el campo de lo sexual y (no) reproductivo, tanto en la Argentina como en San Juan, “por ende –dice-, comprender la construcción social de las masculinidades y su relación con la salud se reconoce imprescindible para mejorar las condiciones sanitarias, así como para disminuir el riesgo o el daño en la salud sexual y (no) reproductiva tanto de varones como de mujeres, de niñxs y de la diversidad de identidades de género”.

La vergüenza hija del machismo
Uno de los hallazgos de la tesis de Doctorado es que, en cuanto a temas de salud sexual, en lo cotidiano efectivamente quienes asisten a consultas o búsqueda de atención son mayormente mujeres. “Los varones de la comunidad no asisten con asiduidad y, cuando lo hacen, principalmente es para retirar preservativos –entre los grupos más jóvenes-, y en algunos pocos casos para la consulta por infecciones de transmisión sexual”, dice Galoviche. Por ello, sostiene: “La vergüenza, el miedo a exponerse frente a personas que pueden resultar vecinas o conocidas, la desinformación, así como una carencia de hábitos que promuevan el involucramiento informado y respetuoso de los varones en salud sexual y (no) reproductiva son las causas principales por las cuales no acuden a estos servicios de salud. Se puede constatar que aún juega una Masculinidad de tipo Hegemónica que exige de los varones la fuerza, la virilidad, el poder y la productividad que de algún modo los aleja de pedir ayuda”.

Victoria Galoviche: «Comprender la construcción social de las masculinidades se reconoce imprescindible para mejorar las condiciones sanitarias»

En persona
Galoviche recolectó testimonios que reflejan el imaginario de algunos varones, lo que, tal vez, es muestra del gran universo patriarcal machista. “Que se cuiden en esto de la sexualidad, que se pongan preservativo, que vean que la mujer con la que van a estar esté sana, que se averigüen cómo anda, cómo está”, sugirió un varón adulto. “Les diría a los varones jóvenes que se cuiden, que usen preservativos, que no anden en cualquier lugar, seleccionar las mujeres, hay distintas partes donde hay distintos tipos de mujeres”, aconseja otro, no sólo depositando toda la responsabilidad en las mujeres, sino con un discurso de cosificación que invita a seleccionar mujeres de entre saldos y ofertas en una feria. Consultada por Revista la U sobre este tipo de visiones, la investigadora dice: “La verdad no me lo esperaba, y me llamó mucho la atención. De hecho, es uno de los hallazgos nuevos para mí, que además no lo había evidenciado en otros estudios precedentes. La idea del varón que debe cuidarse frente a las mujeres, que son finalmente a quienes se les deposita la capacidad ‘de enfermar’, habla de que no sólo el cuidado está feminizado al interior de los hogares o parejas, sino también la enfermedad”.

¿Nuevos tiempos?
La investigadora advirtió algunas expresiones que podrían significar el asomo de nuevos tiempos y nuevas formas de concebir la masculinidad en esta temática. “Va cambiando todo, ahora no tienen vergüenza de llevar un niño alzado”, observó una mujer adulta de Chimbas. “Con ella –pareja- nos cuidamos, más allá de que hayamos tenido una hija. Ahora nos levantamos temprano, nos perdemos la mañana los dos, pero hacemos todos los chequeos y controles, hace ya seis meses que estamos yendo juntos por el tema de estar yo con mi hija y tener responsabilidad, que eso es lo lindo”, contó un varón joven, también de Chimbas. “Ahora es más compartida y el varón se está cuidando mucho más. Van lento, pero van aprendiendo”, sostuvo un varón adulto de Angaco.
“¿Podría hablarse de nuevas masculinidades?”, pregunta Galoviche. Y responde que, más bien, “se trata de algunas adaptaciones o corrimientos respecto de la masculinidad hegemónica, pero no de profundas transformaciones a nivel colectivo, cultural y social. Es una situación que reviste características de una masculinidad cómplice. El escenario que se vislumbra, revela que aún resta mucho para conformarse en nuevas construcciones de ser y hacer sobre el género, que forjen reales, profundas e incomodas transformaciones en el paradigma machista y en las reglas de juego de las relaciones de género”.

Nuevos tiempos
Cuando Victoria Galoviche refiere a la temática “salud sexual y reproductiva” (construcción semántica que debe ser revisada), agrega entre paréntesis un “no” que precede a “reproductiva”, incluso en el título de su tesis. Ello tiene un fundamento: “Yo tomo ese concepto de la socióloga Josefina Brown, que nos propone pensar y tensionar los conceptos derechos sexuales y reproductivos, y convida a definirlo de esta manera: ‘Derechos Sexuales y (no) Reproductivos’. La autora reflexiona sobre ellos desde un punto de vista teórico y político al poner a circular la posibilidad semántica de que las mujeres puedan elegir voluntaria y libremente no procrear”, revela la investigadora de la UNSJ.

Imagen de portada: www.pexels.com

“Masculinidades y Salud Sexual y (no) Reproductiva: prácticas y percepciones sobre la salud/enfermedad/cuidado de varones en la provincia de San Juan” – Dra. Victoria Galoviche – Doctorado en Ciencias Sociales UnCuyo (Mendoza)

Directora de tesis: Dra. Laura Garcés

Co- Director: Dr. Pablo Rodríguez Bilella