“No ha sido fácil pero con paciencia y dedicación, todo se puede”

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Agustina Noriega es hipoacúsica de nacimiento, tiene 27 años, un hijo de 6 y durante la pandemia se reinventó para enseñarle virtualmente Lengua de Señas a 11 alumnos a través de videoconferencias.

 

Por Francisco Lahti

Agustina Noriega es hipoacúsica de nacimiento. Tiene 27 años, un hijo de 6 y es profesora e instructora de Lengua de Señas Argentina en la Facultad de Ingeniería. Enseña a 11 alumnos de diferentes edades.
Por efecto de la pandemia, Agustina comenzó a trabajar en forma virtual por medio de Zoom o Meet, aplicaciones de videoconferencia.
Cuenta que lo más difícil para ella es “cuando a veces se cae la conexión y hay que detener la clase hasta que vuelva. Varias veces a los alumnos se les cae la conexión, me tienen que avisar que se les cortó y se pierde tiempo”. En ese sentido, agrega que “no ha sido fácil pero con paciencia y dedicación, todo se puede, no todos tienen buena conexión y los profesores tratamos de enseñar con mucha paciencia y entender la situación de cada alumno y todo lo que esté pasando”.
Por su parte, Rodolfo Vega es el director (y también profesor) del Curso de Señas en el que enseña Agustina. Él se encarga de armar los cursos y organizar días y horarios. Hace 13 años, en la Facultad de Filosofía, Humanidades y Artes empezó con los cursos de extensión que actualmente también se dictan en Ingeniería.


Según cuenta Agustina, debimos “reinventarnos y buscar soluciones para poder seguir trabajando, esta vez en modalidad virtual y cada uno desde sus casas elegir aplicaciones según sus conexiones”, explicó Agustina.
Destaca que lo mejor de trabajar virtualmente es que la mayoría de sus alumnos lograron terminar los módulos de la clase a pesar de las dificultades de la situación. “Lo lograron y nos sentimos orgullosos de que hayan podido terminar las clases y que pudimos y aprendimos cómo trabajar virtualmente”.
En cuanto a lo negativo, señala la falta de conectividad en algunos casos. “Aunque trabajar virtualmente es cómodo, a veces es difícil por las conexiones malas pero siempre se puede y se logra”.
El deseo de Agustina para el año que viene es que esta situación mejore y poder volver a las clases presenciales y virtuales. “Lo ideal sería mantener ambas modalidades. Quizás habrá algunos cambios o ideas mejoradas, lo que hemos aprendido durante la pandemia. Antes no hacíamos casi nada de forma virtual, al principio nos costaba mucho, al poco tiempo aprendimos cómo trabajar de otra manera”.

Fácil de aprender
Según Agustina, la lengua de señas es fácil de aprender. “Puede parecer difícil para algunos pero en realidad es fácil, son palabras muy básicas para empezar y de a poco vas practicando con las manos, el cuerpo y facialmente, te vas acostumbrando y mejorando con el tiempo. Es como aprender inglés pero es lengua de señas, a través de las manos”.
Cuenta que ella empezó a aprender en la Facultad de Filosofía a través de un par de módulos hasta que cambió a la Facultad de Ingeniería hasta recibirse de profe. “Aprendí practicando, prestando atención a la profesora, yo entendía más porque soy sorda, entiendo más al principio me costaba poco y al tiempo iba mejorando, sumando más palabras, aprendés día a día, como todo”.
Para Agustina, algo está cambiando para mejor en San Juan. “Ya han cursado varios empleados de la Municipalidad, del Centro Cívico, policías, enfermeros, hasta algunos diputados, maestros de escuelas primarias y secundarias. Están aprendiendo lengua de señas para comunicarse mejor con las personas sordas, hacer más accesible la comunicación y que así pueda haber más intérpretes para acompañar e interpretar, por ejemplo, para hacer trámites en comisarías, hospitales, etc., es muy importante eso”, señala.
Antes de terminar la nota, Agustina dejó un mensaje especial para todos sus alumnos: “Me siento muy orgullosa de ustedes, que hayan podido lograr terminar las clases, que pudieran entender, compartir, conocernos virtualmente a pesar de la situación difícil y que lo lograran, estoy muy feliz por ustedes, que hicieron todo con muchas ganas de aprender, practicaron y lo hicieron muy bien, aprendimos cómo enfrentar esa situación y logramos algo muy positivo con esfuerzo y dedicación”.

 

Cómo aprender. Quienes quieran aprender Lengua de Señas, sólo tienen que presentar fotocopia de DNI y analítico de primaria y/o secundaria en calle Mitre 647, entre Caseros y Güemes los lunes, miércoles y viernes, de 17 a 19 hs. o llamar al teléfono de Secretaría para inscripciones y consultas: 264 4635627.

 

MÁS DATOS
Según datos del Ministerio de Salud de la Nación, cada año se espera que nazcan en Argentina entre 700 y 3.000 bebés con hipoacusias de diverso grado y diferentes causas. La sordera o la hipoacusia es la incapacidad total o parcial de oír sonidos en uno o en ambos oídos. En la mayoría de los casos el trastorno es de origen genético y se manifiesta desde el nacimiento.